En este artículo encontrarás información sobre las etapas en las que se dividen los 117’3km que separan Sarria (que no Sarriá) y Santiago de Compostela. ¿Quieres saber más sobre cómo organizar este viaje? ¡Comencemos! Xacobeo 2021Este año 2021 es un año Xacobeo, un año Santo Compostelano donde aquellos creyentes que completen el Camino podrán quedar absueltos de sus pecados. Es un año especial, que se celebra cada año en el que el día 25 de Julio, el día del Apóstol Santiago cae un domingo. Este año, seas creyente o no, es un buen año para embarcarte en la aventura. Tendrás más compañeros/as de ruta y tendrás la oportunidad de disfrutar de muchas las tradiciones, eventos culturales y festivales a lo largo de tu recorrido. Cuando llegues a Santiago, además te esperará un especial premio: podrás acceder a la Catedral desde La puerta Santa que solamente se abre los años santos. Esta puerta ha permanecido cerrada 11 años desde el último Xacobeo, celebrado en el año 2010 y se ha vuelto a abrir el 31 de diciembre del 2020. Xacobeo 2022Pero...¿no habíamos quedado que el año Xacobeo es el 2021? Sí, y también te doy una buena noticia: el Xacobeo ha sido prolongado hasta el año 2022. El Papa Francisco ha decidido prolongar el año Santo debido a la situación de pandemia de la Covid-19 que estamos viviendo, para evitar posibles aglomeraciones y cumplir las recomendaciones sanitarias, de modo que la Puerta Santa cerrará sus puertas el 31 de diciembre del 2022. La decisión de Roma ha sido muy aplaudida por la Xunta y el Concello; ya que, de todos es sabido que la Ruta supone una gran entrada de dinero para no solo Galicia y el hecho de que la pandemia "frene" el turismo ya había supuesto grandes pérdidas económicas, como para que siendo un año tan especial, supusieran aun más. Por lo que tanto si es en el 2021 como en el 2022...¡Feliz Xacobeo! Etapas del Camino Francés Oficial El último tramo del Camino Francés se divide en 5 etapas. Día 1: Sarria-Portomarín (22’4km) Día 2: Portomarín-Palas de Rei (25km) Día 3: Palas de Rei-Arzúa (28’8km) Día 4: Arzúa-Pedrouzo (19’1km) Día 5: Pedrouzo- Santiago de Compostela (20km) Nuestro Itinerario del Camino Francés Viendo las 5 etapas oficiales, nos pareció que caminar una media de 22km diarios estaba bien; pero, viendo los 28’8km de la etapa 4 (Palas de Rei-Arzúa), decidimos dividir la etapa en dos, haciendo una parada en Melide. De esa manera, conseguiríamos prolongar un día más el Camino e intercalar días de caminata más ligera. Día 1: Sarria-Portomarín (22’4km) Día 2: Portomarín-Palas de Rei (25km) Día 3: Palas de Rei -Melide (14’8km) Día 4: Melide -Arzúa (14km) Día 5: Arzúa-Pedrouzo (19’1km) Día 6: Pedrouzo- Santiago de Compostela (20km) Sarria-Portomarín (Día 1)Salida: 7:10 Llegada: 12:45 Kilómetros recorridos: 25’3* km * Esta cifra es distinta a la que se indica previamente y puede ser debido a la referencia que tomamos a la hora de empezar en Sarria. Salimos de Sarria (km 117’3) tras dejar las llaves en la caja de la Casa Barán, nos pusimos en marcha hacia Santiago por la Rua Maior. Los primeros kilómetros y primeras sensaciones, fueron muy buenas. El tramo entre Sarria y As Paredes trascurre sin darse cuenta. A partir de As Paredes comienza poco a poco el ascenso hacia Rente, donde se puede decir que el Camino nos echa el primer pulso en la subida hacia Barbadelo [situada entre As Paredes y Rente]. Recuerdo que este Camino me llevé una pulsera de actividad y me fijé en cómo se me aceleraba el corazón en la subida…todo hay que decir: fue la primera. Días después subí cuestas peores que ésta; pero, como el cuerpo ya se acostumbra más, ni el corazón se me aceleraba ni me costaba tanto. En Barbadelo hay un albergue de peregrinos con cafetería. Aquí podéis echar el primer sello a la Credencial tras salir de Sarria. El perfil de etapa que nos encontramos a partir de ahora es quebrado, con alternancia de subidas y bajadas, comúnmente conocido como “rompepiernas” en la jerga del Camino.
Seguimos el camino por zonas de prados, huertas y zonas boscosas donde los robles proporcionan una buena sombra para resguardarse del sol si es que ese día “azota” con fuerza. En el trayecto hasta llegar al mojón que indica el kilómetro 100, situado entre Brea y Morgade, podréis disfrutar de bonitos árboles frutales tales como ciruelos o cerezos silvestres. Una vez más, resulta “bochornoso” el estado en el que se encuentra el mojón 100 gracias a la gente sin educación que ha pintarrajeado el kilómetro. Medio kilómetro después de pasar por el mojón kilómetro 100, se encuentra “Casa Morgade” con posibilidad de alojarse o reponer fuerzas en su bar. Aquí podéis sellara también la Credencial. Tras el paso por Casa Morgade, hay una bajada bastante incómoda con piedras. También decir que en los sucesivos kilómetros, tendréis bastantes posibilidades de quedaros a pasar noche en los albergues que encontraréis antes de llegar a Portomarín. El perfil de etapa sigue siendo quebrado con falsos llanos y seguramente en algún momento toparéis con ganado que compartirá camino con vosotr@s en algún momento. Cuando casi estemos llegando a Portomarín, hay una bajada que ofrece dos alternativas. Una pendiente bastante pronunciada (hacia la izquierda) y otra, a la derecha, para bicicletas que es algo más larga; pero, con menos desnivel. Nosotros decidimos tirar para la derecha y fue una decisión acertada. Hay pendiente, está claro; pero, el día siguiente oiríamos a un peregrino quejarse diciendo que fue por la izquierda…y en la hazaña se dejó una uña… Tras la bajada, nuestras piernas descansan y nos refrescamos atravesando los 350m de puente sobre el Miño para llegar a Portomarín. Cuando lleguéis a la entrada del pueblo, os aguarda la sorpresa del final de etapa: un puente antiguo que debéis subir para llegar a vuestro destino del día. Cuando llegamos a Portomarín hacía muchísimo calor, era un martes y se celebraba un animado mercado. Tras sellar la credencial en la Iglesia de San Nicolás de Portomarín nos fuimos a dejar las mochilas a nuestro alojamiento: Casa do Maestro. Portomarín-Palas de Rei (Día 2)Salida: 6:50 Lllegada: 13:20 Kilómetros recorridos: 25 km Salimos de Portomarín (km 92) tras dejar las llaves en la caja de la Casa do Maestro y poner el primer sello del día en la Credencial. Ese día la niebla nos mostró esa “Galicia Mágica” en la que caminar, a pesar de que fuera muy temprano, era muy agradable. Ya sabéis lo que dice el refrán “todo lo que sube, baja”; por lo que, bajamos de Portomarín y volvemos a encontrarnos con el río Miño. En este punto, pongamos el contador a “0” y comenzaremos a sumar kilómetros de desnivel positivo del día (335m). Es decir: la etapa de hoy se caracteriza por su perfil ascendente, casi la mitad de la etapa, hasta llegar a Serra de Ligonde y quiero destacar la primera subida de las faldas de Monte San Antonio, tras dejar atrás el Miño, que nos “tomará” el pulso para comenzar bien el día. Y digo tomar el pulso; porque, la peor subida del día la encontraremos entre Gonzar y Castromaior en la que además si el día es soleado será un tramo más exigente. Volviendo a nuestro Camino, tras subir el repecho de San Antonio, llaneamos hasta llegar al borde de la carretera donde el asfalto nos acompaña durante muchos kilómetros hasta llegar a Gónzar. Lo mejor del Camino hasta Gonzar es la niebla que nos acompaña. Como todavía no ha amanecido, permanece densa e inmóvil durante las primeras horas. Y destaco ésto; porque, si tuviéramos que realizar este tramo a pleno sol, tendrá que ser poco agradable; ya que, es un tramo donde la presencia del asfalto es considerable y no hay zona arbolada por donde caminar al resguardo del sol. Además, el asfalto siempre cansa más y hace que tengamos esa sensación monótona que tan poco me gusta al caminar. Tomamos fuerzas en Gonzar para superar la “prueba de fuego” del día subiendo hacia la Serra de Ligonde pasando por Castromaior [el tramo más exigente está tras pasar Castromaior]. Quien quiera ver Castromaior, deberá desviarse un pelín hacia la izquierda. Nuestra especial “letanía” del día acaba en Serra de Ligonde y sus 722m de altitud y comienza poco a poco nuestro descenso hasta llegar a Palas de Rei. El tramo que más me gustó este día fue de Ventas del Narón hasta Ligonde junto con Castromaior; aunque, al tratarse de subida y ya venía un poco cansada del sube-sube-sube de la etapa que no disfruté tanto. En Ventas del Narón mucha gente aprovecha para parar y comer algo. Me acuerdo haber visto furgonetas en las que “el porteador” traía bocadillos y refrigerios para grupos de peregrinos que iban a efectuar su pit stop en la etapa de hoy. Aquí se encuentra la Capilla de la Magdalena: un antiguo lugar que pudo servir de hospital de peregrinos, donde se puede sellar la credencial. Aquí entramos para sellar las Credenciales y un hombre vestido de templario que estaba ciego, estaba gritando a unas peregrinas de Argentina o Uruguay echándoles en cara que no le habían dado un donativo. Cuando entramos a la capilla pudimos comprobar su cara desencajada; ya que, realmente sí que habían dado un donativo, pero parece ser que para el señor, que comprobaba las monedas al tacto, no era suficiente. Dubitativos, accedimos a que nos sellara la credencial y para ello, tenías que coger la mano del buen hombre que sujetaba el sello y ayudarle a sellar la credencial. Nosotros éramos 3 y le dejamos 1€ por cabeza y aun así, tampoco nos libramos de sus “lindas palabras” cuando ya salíamos…también decir que de buenas formas, pero le contestamos diciendo que 3 credenciales, 3 donativos…No sé qué más quería… Y ahora sí, con rapapolvos incluido disfrutamos del camino hasta legar a Ligonde. Aquí, justo después de Ligonde, hay una bajada que es un poco “enrevesada” e incómoda. Poco a poco fuimos descendiendo hasta llegar a Palas de Rei, pasando por Lestedo y Os Chacotes donde hay posibilidad de alojarse si no se quiere pernoctar en Palas de Rei. En Lestedo, nos tomamos un Aquarius para recuperar un poco la marcha. Su precio fue de 1’8€, para que os hagáis la idea. Al llegar a Palas de Rei fuimos a dejar las mochilas al alojamiento, Casa Camiño, y nos fuimos a buscar un sitio donde comer. A la tarde, ya más tranquilos y con menos calor, fuimos a la Iglesia de San Tirso, nos quedamos a la misa del Peregrino, a las 19:00 y después aprovechamos para sellar la credencial. El horario es de 7:30-13:30 h. y de 15:30-20 h desde Semana Santa hasta finales de octubre aproximadamente. Palas de Rei-Melide (Día 3) Salida: 6:50 Lllegada: 10:25 Kilómetros recorridos: 14’4 km Salimos de Palas de Rei (km 67) hacia Melide por la rúa do Apostolo y una escultura con peregrinos que parecen bailar nos saludan al paso. Al de pocos pasos, nos aguardan los primeros robledales y eucaliptales. La etapa oficial es hasta Arzúa y esa opción suman 28’8km. Dado que ya llevábamos 2 etapas con bastantes kilómetros, decidimos acortar la etapa y hacer noche en Melide. Lo cierto es que hicimos la etapa bastante rápido, si comparamos los horarios de llegada de las etapas anteriores; pero, como siempre digo, prefiero madrugar y andar “con la fresca” que luego, con el sol, caminar sea un horror. Hoy nos enfrentamos a otra etapa “rompepiernas” de perfil quebrado, como de Sarria-Portomarín. Lo cierto es que tanto sube-baja sube-baja empiezan a afectar a los peregrinos y hoy, que no sé si es casualidad, vemos mucha gente con prendas para lesiones en el Camino. Siempre decimos que mucho ojo con los descensos: es mejor ir despacito que pisando fuerte para frenar a cada paso. Eso solo conseguirá resentir nuestras articulaciones, en especial, las rodillas. Pero os tengo que confesar que el fin de etapa, tiene premio y uno muy bueno. ¿Sabíais que Melide es también conocida como “Capital del pulpo”? ¿A que ahora tenéis un motivo más para darlo todo en esos toboganes que suben y bajan? La etapa en general a pesar que su perfil se puede tornar algo cansino, es muy agradable. Lo que más me gustó fue andar bajo los árboles. Si sale un día soleado, no os preocupéis que a diferencia de la etapa anterior, aquí los frondosos bosques de robles, eucaliptos y abedules nos proveerán de buena sombra hasta llegar a Melide. Con los primeros rayos del sol del día caminamos por San Xulián do Camiño y Pontecampaña: mágicas estampas que nos hacen disfrutar del camino. En las sucesivas Casanova y Pontecampaña hay bares donde reponer fuerzas si se desea. Seguimos por Leboreiro fijándonos en el Cabazo do Leboreiro. Lo cierto es que es un “almacén” algo especial. Se trata de una especie de “cesto” grande, me atrevería a decir que es de mimbre y está cubierto de paja en la parte superior: que recuerda a una pequeña choza. Y resulta curioso; porque, antiguamente se utilizaba para guardar el maíz. Está justo situado un poquito antes de llegar a la Iglesia de Santa María de Leboreiro. Por cierto…os habéis fijado ¿que hay una pelota encajada en el campanario? Tras pasar Leboreiro cruzamos el “río seco” por un puente medieval tras un peregrino que iba a caballo a Santiago. Justo después se encuentra el parque empresarial de Melide, un tramo no tan atractivo como antesala de San Xoán de Furelos: una zona, con más encanto. La zona del puente Medieval por donde cruzaremos el río Furelos es muy bonita. Desde aquí seguiremos hacia a parroquia de San Xoán de Furelos para sellar la credencial. No os preocupéis; ya que, queda poco para llegar a Melide. Eso sí, a partir de San Xoán de Furelos ya diremos adiós a la sombra proporcionada por los árboles para hacer los últimos kilómetros hasta Melide. Una vez en Melide nos dirigimos hacia la Capilla de San Roque de Melide para poner el sello en la credencial. Horario 10:00-13:00. Comparando con el Camino Portugués, hasta ahora hemos visto muy pocos cruceiros; pero, deciros que en Melide, y justo al lado de la Capilla de San Roque, se encuentra el Cruceiro de Mellid que afirman que es el más antiguo de Galicia y data del S. XIV. De camino al alojamiento de ese día, Casa Pereiro, empezamos a fijarnos en la cantidad de pulperías que había en Melide. En alguna hasta daban de probar un trocito cuando pasabas, lo cual, está muy bien; pero, que te griten como a una vaca y tratando a los peregrinos de esa guisa tan…desagradable (por decirlo finamente), decidimos que no nos quedaríamos ahí a comer. Afortunadamente, como os contaré en otro artículo, dimos con un buen lugar donde comer buen pulpo y donde nos trataron como en casa. Melide-Arzúa (Día 4) Salida: 6:45 Lllegada: 10:00 Kilómetros recorridos: 13’5 km Salimos de Melide (km 56’2) hacia Arzúa. Hoy se unen a la ruta l@s peregrin@s que vienen del Camino Primitivo. El perfil de etapa sigue siendo “rompepiernas” y con 3 subidas destacables; pero, en general, es bastante agradable. La etapa con tramos de sol y sombra y unos cuantos hórreos, se afronta con facilidad y hasta Boente va bastante bien. En Boente se puede sellar la credencial en la Iglesia de Santiago, que abría sobre las 8:00. Entre los kilómetros 43-45 hay tramo de subida entre Boente y Castañeda. En ambos lugares hay posibilidad de alojarse o tomar algo para recuperar fuerzas. Desde Castañeda nos dirigimos por pistas hacia Ribadixo da Baixo para emprender la última subida del día hasta llegar a Arzúa. Llegamos muy pronto a Arzúa y dado que la habitación del alojamiento no iba a estar lista para ese día, nos dirigimos hacia la Iglesia de Santiago a sellar la credencial. En ese momento estaban oficiando una misa y aprovechamos para quedarnos un ratito. La misa se oficia a las 10:00 y la del peregrino a las 19:00. Hoy si hay alguna persona queriendo motivarse con algún manjar, que apunte el queso de Arzúa. ¡a ver si os gusta! Arzúa-Pedrouzo (Día 5) Salida: 6:45 Lllegada: 11:05 Kilómetros recorridos: 18’9 km Salimos de Arzúa (km 39’1) hacia Pedrouzo. En este punto se unen a la ruta l@s peregrin@s que vienen del Camino del Norte. Hoy tenemos por delante una etapa muy tranquila y llevadera. De camino a Preguntoño nos acompaña el aroma a eucalipto de sus árboles. Disfruté en la primera mitad de la etapa que discurría entre pequeñas aldeas, bosques y maizales. Hay algunos tramos de subida; pero, nada comparable con días anteriores: los superamos sin problemas. También hay algunos kilómetros que recorreremos al margen de la carretera cerca de Calle; pero, como decía, se trata de una etapa sin complicaciones. Conforme pasan los kilómetros nos adentramos en Salceda que cuenta con albergue, bar e incluso una farmacia para quien lo necesitara. Tras pasar por Salceda la carretera nacional es una constante más en el horizonte hasta llegar a Pedrouzo y también toparemos con la tumba de Guillermo Watt: un peregrino que murió en Salceda a casi 28km de la meta. Entre A Brea y O Empalme tened mucho cuidado al pasar la carretera. Una vez en O Empalme, la etapa está casi resuelta. No hay más que seguir el Camino oficial (tomad el camino que va por la derecha en la bifurcación para evitar el rodeo por ir por Santa Irene). Comienza el descenso paulatino entre eucaliptales que proporcionan una agradable sombra hasta a Rúa: situada a 1 kilómetro aproximadamente de Pedrouzo. Este kilómetro final lo realizaremos al lado de la carretera. La Pensión Platas que era el alojamiento que reservamos para ese día todavía no tenía las habitaciones libres; por lo que, nos acercamos a la parroquia de Santa Eulalia de Arca, a unos 500-800m de Pedrouzo, donde supuestamente termina la etapa de hoy. Pensando en que la parroquia estaría abierta para sellar la credencial, fuimos hasta allí; pero, no tuvimos suerte: estaba cerrada (11:30). Más tarde supimos que la parroquia abre para la misa del peregrino que se celebra a las 19:00 y es el momento en el que se puede aprovechar para sellar la credencial. Hasta ahora no hemos hablado de la meteorología, es cierto. Casi ni lo menciono; porque, tuvimos mucha suerte. Por si no lo he dicho, comenzamos el Camino el 8 de Julio. Recorrimos kilómetros bajo un cielo azul con muy pocas nubes desde Sarria…hasta llegar a Pedrouzo. Cuando volvíamos de Arca ya asomaban nubarrones de tormenta que acabaron descargando justo después de comer. Por esa misma razón decidimos quedarnos en el alojamiento sin ir a sellar la credencial…más que nada por no empaparnos con la lluvia que cayó. Parece que llovió lo que no había llovido en toda la semana. Pedrouzo-Santiago (Día 6) Salida: 6:40 Lllegada: 11:20 Kilómetros recorridos: 20’2 km Ya a penas nos quedan 20km para alcanzar nuestra meta. Decidimos madrugar un poco más; pero, lo cierto es que a la hora que salimos, todavía ni siquiera había amanecido y era de noche: algunas personas portaban frontales o linternas para alumbrar el camino. Para ponernos en marcha nos dirigimos hacia el Ayuntamiento, después caminamos hacia el campo de fútbol y finalmente nos adentramos en el eucaliptal que está hacia la izquierda. Hoy nos dirigimos hacia Santiago: llenos de ilusión y ansiosos por pisar la Catedral. La etapa de hoy no presenta serias dificultades en cuanto al terreno; pero, nos pueden ocurrir dos cosas. La primera: al igual que nos ocurrió en el Camino Portugués, hay un momento en el que la señalización empieza a desaparecer, pierdes la referencia de “¿cuánto queda para llegar?” y en ocasiones resulta algo tedioso. Y en segundo lugar: muchas personas sienten miedo. Miedo a poner fin a ese estado en el que las rutinas; a separarse de l@s compañer@s de fatigas que nos han acompañado tantos kilómetros y al temido: ¿y ahora qué? No sé qué has sentido, sientes o sentirás en ese momento; porque, tod@s somos diferentes. Lo que sí creo que te mereces saber y reconocer es que el esfuerzo ha valido la pena: cuando las fuerzas y las piernas flaquean has hecho lo imposible por seguir y alcanzar tu objetivo. ¿No te parece algo extraordinario? Creo que a veces necesitamos ganar confianza en nosotr@s mism@s y nos ponemos pruebas para ponernos a prueba y ver si somos capaces. Siendo así, deberíamos aprender a extrapolar nuestros aprendizajes a otros ámbitos de la vida: está demostrado que “si quieres, puedes”. Seguimos en ruta por pistas forestales y camino que bordea carreteras asfaltadas. Como hemos dicho que la señalización y la falta de paneles que indican el número de kilómetros que aún quedan por recorrer…desde Lavacolla, donde está el aeropuerto de Santiago de Compostela, quedan unos 10 km; entre los centros de la televisión Galega y RTVE unos 7 km (hay un camping en medio) y por fin el Monte de Gozo, que nos indican que nos quedan 5km aproximadamente para acabar nuestra caminata. En la Capilla del Monte do Gozo echamos el penúltimo sello en nuestra Credencial. Desde el Monte do Gozo se puede ver Santiago a lo lejos. ¡Ya queda menos! Pero cuidado, nos aceleréis que ahora toca un tramo de bajada de aproximadamente 1km para “rematar” nuestras rodillas. A partir de aquí seguiremos las indicaciones del suelo en forma de vieiras hasta la Catedral. ¡ánimo que ya entramos en el Caso Viejo por rúa das Casas Reais: esto ya está hecho!! Desde ahí nos dirigimos hacia el Monasterio Martín Pinario…¡últimos pasos!! La música de las gaitas que retumban en el Arco del Palacio nos indican que está ahí: nuestra meta, ¡nuestro momentazo! ¡Llegamos a la Plaza del Obradoiro! Ya nos podemos quitar las mochilas y dar saltos de alegría, ¡lo hemos conseguido! La Compostela Content@, ¿eh? Pues ahora solo nos queda poner el último sello en nuestra Credencial y solicitar el documento que acredita que hemos realizado los últimos 100km del Camino de Santiago. Obviamente, quien haya empezado en Saint Jean de Pied de Port, Roncesvalles o donde quiera que sea, también puede solicitar su Compostela. Todas las personas que quieran solicitar dicha acreditación, deberán dirigirse a la Oficina del Peregrino en la Rúa das Carretas, 33. Cuando hicimos el Camino Portugués no tuvimos que esperar; pero, esta vez sí: hicimos cola durante 30 min. Cuando llegue vuestro turno, os pedirán la Credencial y os preguntarán algunas cosas como: Nombre, procedencia, dónde comenzaste el Camino, a qué te dedicas y el motivo por el que has hecho el Camino (religioso o deportivo-otros motivos. La razón por la que te preguntan la motivación de hacer el Camino no es otra que el tipo de Certificado que te expedirán. El certificado que otorgan si has hecho el Camino por motivos religiosos se llama la Compostela. Si los motivos son deportivos y otros, te darán otro certificado. Tras comprobar los sellos de nuestra Credencial y poner el último sello, nos expedirán el certificado que hemos solicitado de forma gratuita. Si quieres, aquí mismo puedes comprar unos tubos donde guardar el mismo sin que se arrugue o se doble o solicitar el certificado de los kilómetros recorridos, conocido como el Certificado de Distancia que no es gratuito. : En la Oficina del Peregrino tienes baños, parking para bicicletas y oficinas de Correos, Alsa y Renfe. Esto es una gran ventaja; ya que, se pueden comprar billetes de vuelta, enviar la mochila o la bicicleta de vuelta a casa, etc… ¿Y ahora qué? Disfruta de la ciudad. Deja la mochila en la Consigna de la Oficina de Correos o en alguna otra, que hay unas cuentas, cerca de la Catedral. El precio de la Consiga de Correos es 2’5€/día para mochilas y 3€/día para las bicicletas. El horario de la Oficina del Peregrino es de 8:00-20:00 de Semana Santa hasta finales de Octubre y d 10:00-19:00 en invierno. La Misa del Peregrino en Santiago de Compostela Camino, asistir aunque sea un rato a la Misa del Peregrino, es una forma muy buena de ponerle broche final a esta experiencia. Cuando hicimos el Camino Portugués asistimos toda la misa e incluso tuvimos la gran suerte de poder ver el botafumeiro. A mí, por lo menos, me pareció una buena experiencia. Esta vez en cambio, la Catedral estaba de obras y no se oficiaban misas.
En general, hay dos misas del Peregrino en Santiago de Compostela: a las 12:00 y a las 19:30. Ahora que la Catedral está de obras, se ofician misas en la Iglesia de San Francisco a las 12:00; Iglesia de Santa María Salomé: hay 4 misas diarias (7:30, 9:00, 10:00, 19:00) de lunes a viernes y más los fines de Semana y en la Parroquia de la Corticela a las 11:00. Os recuerdo que no está permitida la entrada a la Catedral con mochilas. Y si me permitís un consejo final, lo mejor que podéis hacer cuando lleguéis a Santiago es dirigiros a la Oficina del Peregrino, solicitar el certificado; dejar las mochilas y acercaros a la Plaza del Obradoiro a sacaros montones de fotos o visitar la Catedral. ¿Y ahora, qué? ¿Tienes ganas de más? ¡Sigue nuestros pasos hacia Muxía, pasando por Finisterre!
0 Comentarios
Tu comentario se publicará tras haber sido aprobado.
Dejar una respuesta. |
¡Déjanos un Comentario!Categorías
Todos
Nos visitan desde: |