Hace tiempo que no escribo en el blog, pero sigo aquí, no me he olvidado de él. En este caso, aprovechando que una gran compañía ofrecerá vuelos diarios en verano entre Amsterdam (Ámsterdam-Schiphol) y Bilbao, aquí va un primer capítulo para ir abriendo boca. En esta ocasión haremos un repaso por los lugares que no debes dejar de visitar en la capital de los Países Bajos, ¡Allá vamos! Museo Van Gogh en AmsterdamEl Museo Van Gogh está situado en el Museumplein o “Plaza de los Museos” de Amsterdam junto con otros museos de renombre como el Rijksmuseum o Museo Nacional de Amsterdam reabierto al público en 2013, el Stedelijk Museum en o Museo Municipal y el Koninklijk Concertgebouw o la Sala de Conciertos Real. En este museo recorreréis la vida del artista a través de sus pinturas, bocetos y cartas, pasando por Nuenen (Países Bajos), Amberes (Bélgica), Paris o Arlés (Francia) entre otros. Entre sus obras más importantes figuran: “Los comedores de Patatas” (Nuenen, 1885), Calavera fumando un cigarro (Amberes, 1886), La habitación de Arlés (Arlés, 1888) y Los girasoles (Arlés, 1889). El precio de la entrada es de 15€ y os recomiendo que vayáis al museo a primera hora, en invierno abre a las 10:00 y en primavera-verano a las 9:00. Están prohibidas las fotos. Para más información clica aquí. Bloemenmarkt -Mercado de las Flores-El tulipán y sus bulbos son toda una institución en los Países Bajos siendo éste su mayor productor-exportador mundial. Curiosamente el tulipán es originario de Asia menor y fue introducido en los Países Bajos en el siglo 16. La climatología del país junto con el tipo de tierra en el que se cultiva (recordemos que los Países Bajos han ganado terreno a la mar) hace que este sea un lugar ideal donde cultivar tulipanes y bulbos. Si lo que queréis es disfrutar de los campos llenos de tulipanes, tendréis que visitar el país sobre el mes de Abril, y el lugar ideal para presenciarlo es el Keukenhof. El Keukenhof es un inmenso parque situado en las localidades de Lisse e Hillegom en el que cada primavera florecen miles de tulipanes de todos los colores inimaginables. Para más información clica aquí. Tras este breve inciso y volviendo a Amsterdam, os recomiendo que os toméis vuestro tiempo y curioseéis por el mercado ya que en él no solo encontraremos tulipanes, si no que podremos ver bulbos de todo tipo. Sin duda, es casi una obligación comprarse unos bulbos bien sean para regalar o para traer a casa. Los precios son variados, pero según pude ver, los bulbos comprados a granel resultaban más caros que comprados en sacos de 100. Aunque parezcan muchos, siempre que se viaje en grupo puede resultar buena idea comprar un saco entre todos y después repartir ya que el precio de un saco de estos ronda entre 6’5-7€. Eso sí en estos sacos preparados no encontraremos bulbos de tulipán especiales; serán de una tonalidad y rayados en colores rosas, naranjas o amarillos. Si queremos algo más original, habrá que comprarlos a granel. Entre las variedades más buscadas están: “Queen of the night” (tulipanes negros), Ballerina, White Parrot (tienen pétalos que imitan a las plumas de un lorito) o China Pink. Por último si lo que queréis es traeros ramos de flores frescas y no gastar mucho dinero, os recomiendo que os deis una vuelta por alguno de los supermercados Albert Heijn de la ciudad ya que con la tarjeta del supermercado (que es gratuita) se pueden comprar ramos a 2€. Nosotras los compramos en el Albert Heijn del Museumplein: Calle Van Baerlestraat 33 A. Frankhuis –La Casa de Ana Frank- Que levante la mano el quien no haya estudiado en la asignatura de Lengua y Literatura como referente de las autobiografías, uno de los libros más vendidos de la historia: ¡El diario de Ana Frank! o Het Achterhuis “La casa de Atrás” como ella lo bautizó. Pongámonos brevemente en situación: Otto Heinrich Frank y Edith Frank-Holländer, judíos residentes en Alemania, vista la crisis económica y el poder que Hitler estaba cogiendo, decidieron mudarse a los Países Bajos (Amsterdam) junto con sus dos hijas; Margot y Anne Frank. Siendo una familia judía en principio alguien podría pensar que la casa de los Frank se encuentra en el Barrio Judío, pero no es así. La primera residencia conocida de la familia estuvo en Merwedeplein, en la zona que hoy en día se conoce como “De Pijp”. Años más tarde, ante la inminente llegada de las tropas nazis a los Países Bajos, Otto Frank decidió esconder a su familia en el escondite de la Fábrica de Pectina que él poseía en la zona de Amsterdam hoy en día conocida como Jordaan. La familia Frank estuvo escondida en apenas 40-50m2 junto con miembros de 2 familias judías más, sumando un total de ¡8 personas en tal pequeño espacio y durante 2 años! Durante ese tiempo 4 empleados de Otto les ayudaron y Ana escribió su diario. Hoy en día se desconoce quién pudo dar el chivatazo, pero los 8 que se escondían en “La casa de Atrás” fueron apresados y llevados a los campos de concentración. Ana y Margot murieron de tifus en el Campo de Bergen-Belsen (Alemania) justo días antes de la liberación del campo. De los 8 apresados solamente sobrevivió Otto, que tras ser liberado de Auschwitz regresa a Amsterdam dónde una de sus exempleadas, Miep Geis, le devuelve el diario de Ana, que había logrado rescatar del saqueo de la vivienda por parte de los nazis. Fue deseo de la propia Ana que tras la guerra se publicara su diario y tras mucho sopesarlo, Otto decidió publicarlo, haciendo que esta, en principio “anónima” historia saliera a la luz ante millones de lectores. Años después el Museo de la Casa de Ana Frank abrió sus puertas, y por deseo expreso de Otto, se mantuvo sin ningún tipo de mobiliario que es justo como os lo vais a encontrar. Por otro lado, aunque se pueda creer que el edificio que alberga el Museo es la auténtica casa los Frank, es una equivocación, ya que la casa auténtica (Prinsengracht 263) se encuentra justo 2 casas más a la derecha que el museo (Prinsengracht 265). To build up a future, you have to know the past. Otto Frank, 1967. Precio de la entrada: 9€, 4’5€ (estudiantes), 0€ (niños). El museo abre sus puertas a las 9:00 de la mañana y cierra entre las 19:00-22:00, según la época del año. Para más información y localización clica aquí. Una última recomendación, el museo recibe muchas visitas al cabo del día por lo que podrían ser buenas ideas: a) comprar entradas de forma anticipada o b) visitar el museo a última hora de la tarde (que es lo que nosotras hicimos). Las bicis en AmsterdamUna de las experiencias top en Amsterdam, siempre que el tiempo acompañe, es alquilar una bicicleta y recorrer la ciudad como un autóctono más. Aviso a navegantes y a peatones, cuidado con los bicicleteros, que circulan a gran velocidad, y os podéis llevar más de un susto ¡si no miráis por dónde cruzáis! El mayor atractivo para decidirse y alquilar una bicicleta son sus 400 km llanos de “bidegorris” (carril-bici). ¿Y a qué precios? El alquiler por un día de una bicicleta con freno de mano, es de unos 15€ en esta empresa. También cabe la posibilidad de alquilar bicicletas que llevan freno de pedal (no os las recomiendo si no estáis acostumbrados, porque la “torta-piñazo-chorrazo” puede ser considerable) o alquilarlas por horas. Y un último apunte, cuidado también con los “chorizos” de bicicletas, que haberlos, haylos y si queréis sacar alguna foto a gente que va en bicicleta…que puede no parecerles del todo bien. Tour Gratuito -Free Walking Tour- en AmsterdamUna buena idea para una primera toma de contacto con la ciudad, puede ser realizar un tour “gratuito” a pie por los lugares más emblemáticos de la ciudad. Nosotras no dudamos y tras presentarnos en el lugar de recogida, durante 3 gélidas horas (era enero, y hacía bastante frío) recorrimos el Red Light District o Barrio Rojo, la Plaza Dam y el Jordaan acompañados de nuestra guía. Al acabar el tour, se acostumbra a dar la propina que se considere a la guía, no siendo ésta obligatoria si es que creéis que no ha cumplido con vuestras expectativas. Durante el recorrido podréis responder a preguntas como: ¿Por qué las casas tienen ventanas tan grandes?, ¿Por qué las fachadas de las casas están inclinadas? ¿Qué hace una Iglesia en medio del Barrio Rojo? ¿Qué hay de la nueva legislación de los coffee shop? ¿A dónde van a parar las bicis robadas? Y muchas otras curiosidades más. Y acabo con una frase que surgió de nuestro viaje a Amsterdam. "Aquí no hay sitio para andar para la peña peatón". M.V, 2011, Amsterdam. ¡Hasta la próxima!
6 Comentarios
28/3/2014 10:39:29
Hola Sandra!
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22/4/2014 03:50:54
¡Hola!
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¡Ámsterdam es una pasada de ciudad!
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